sábado, 30 de abril de 2011


Te mira, te guiña un ojo, te sonrojas y miras a otro lado.
Intentas volver a conseguir y buscar esos momentos, volver a sentir que tu cuerpo te pide eso, te consumen las ganas de un maldito guiño o de alguna frase, de una nota con una carita sonriendo o con algo bonito escrito en ella; sentir el calor del cuerpo de alguien especial cerca o lejos, pero sentirlo, sentirte viva o muerta pero a su lado.
Estar ahí cuando no se le necesita, estar ahí cuando se le necesita, vivir conmigo, no es difícil, es simplemente simple! es sencillamente aguantable y sencillo.
Calmarme cuando lloro o decirme llora cuando realmente necesito estallar, no pido que las personas se maten conmigo. Nunca..
Pero sí que vivan conmigo.

Posdata: Le quiero

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