Escúchame tan
solo unos segundos. Cierra los ojos. Visualiza todo lo que hemos pasado juntos, tú y yo, y nadie más. ¡No! No los
abras aún. Respira hondo, despacio. Toma una gran bocanada de aire. Ahora
imagina, por un momento, todo lo que podríamos llegar a hacer, lo que podríamos llegar
a ser. Imagina tu mano y la mía, entrelazadas, mientras damos un paseo
por la playa, al atardecer. Y como dos locos enamorados, correr hacia el agua,
y sumergirnos. Besos con sabor a sal. Imagina, una tarde lluviosa, una película que me
hiciera llorar. Nosotros bajo la manta, sobre el sofá. Y yo escondiendo la cara en
tu pecho, porque sabes que odio que me vean llorar. Imagina bailar sin música. Imagina como sería
visitar París a mi lado. Imagínate oír mi voz susurrándote
“te quiero” todos los días. Imagina mil locuras, noches en vela, ataques de amor, explorar cada rincón de
la felicidad.Mirarme a los ojos cada día. ¿Lo imaginas? No necesito que me digas
nada. Solo que veas todo lo que te
estás perdiendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario